Barcelona es una de los destinos más populares en España y no es para menos: es una ciudad que ofrece buen clima, arquitectura única, ambiente mediterráneo y una gastronomía increíble.
Nosotras tenemos una relación muy especial con Barcelona ya que fue nuestro hogar durante algunos años: Silvia vivió durante un año y Sara la convirtió en su hogar durante cuatro años. Guardamos muy buenos recuerdos de Barcelona e intentamos volver tan a menudo como podemos. Tenemos amigos allí y siempre que pasamos unos días en la ciudad condal nos envuelve la nostalgia de querer volver a vivir allí.
En el bunker de Barcelona hace unos cuantos años
En este post nos gustaría proponeros una ruta por Barcelona de tres días, perfecta para una escapada de fin de semana largo. En el mapa de Barcelona encontraréis todos los lugares que mencionamos en este post y las rutas que os proponemos.
CÓMO MOVERSE POR BARCELONA
La mejor opción para moverse por Barcelona es a pie, ya que así disfrutarás y conocerás mejor la ciudad. Sin embargo, en algunas ocasiones es interesante usar el transporte público, ya que así podrás acercarte a algunos lugares más alejados.
Para moverte en transporte público en Barcelona, lo mejor es que compres la tarjeta T-Casual con la que tendrás 10 billetes de metro, bus o tranvía que puedes usar tú y tus acompañantes porque no es una tarjeta personal.
También existen varias tarjetas turísticas, que pueden resultar interesantes si vas a utilizar mucho el transporte público o si quieres aprovechar las entradas gratuitas a algunos monumentos que ofrecen. Una de estas tarjetas turísticas es la Tarjeta Hola BCN! para 2, 3, 4 o 5 días. Con ella tendrás acceso ilimitado al transporte público de la ciudad. En este enlace puedes consultar los precios. También existe la Barcelona Pass, que solo es interesante si vas a visitar muchos monumentos, ya que es bastante cara. En este enlace puedes consultar los precios y los monumentos que incluyen.
Calles de Barcelona
DÍA 1: BARRIO GÓTICO, EL RAVAL Y MONTJUIC
El primer día en la ciudad condal puede empezar en la emblemática Plaza Catalunya, el centro neurálgico y kilómetro 0 de Barcelona. Aquí tienen inicio muchas líneas de autobuses urbanos e interurbanos, tiene una estación de metro (líneas L1 y L3), una de cercanías de Renfe (líneas R1, R3, R4 y R7 ) y una de los Ferrocarriles de la Generalidad de Cataluña (líneas L6 y L7, y S1, S2, S5 y S55). La Plaza de Catalunya es el punto de unión entre el núcleo viejo de la ciudad y el Ensanche (Eixample). En la plaza hay varias estatuas importantes como “La Diosa” de Josep Clarà, “Barcelona” de Frederic Marès, “El Pastor” de Pablo Gargallo y el monumento a Francesc Macià de Josep Maria Subirachs.
Desde aquí parten algunas de las vías más importantes de la ciudad: Passeig de Gracia, Portal del Ángel o la Rambla, que será por donde te proponemos continuar esta ruta a pie por el centro de Barcelona.
Edificio de la Rambla
La Rambla siempre están llenas de gente, de día y de noche, por lo que puede ser un poco agobiante para algunos viajeros pero es uno de esos lugares por los que pasarás inevitablemente. García Lorca describió así este lugar icónico de la ciudad: “La calle donde viven juntas a la vez las cuatro estaciones del año, la única calle de la tierra que yo desearía no se acabara nunca, rica en sonidos, abundante en brisas, hermosa de encuentros, antigua de sangre: la Rambla de Barcelona.” Ahora ha cambiado bastante. La Rambla está llena de puestos de souvenirs para los turistas, puestos de prensa y tiendas de flores y animales, sobre todo aves. También hay muchos restaurantes que ofrecen como menú paellas y sangrías, que obviamente debes evitar y que están pensados para los turistas extranjeros, y es que la Rambla es uno de los puntos más turísticos de Barcelona.
En la Rambla hay varios edificios importantes como el Palacio de la Virreina, el teatro Liceo (El Liceu) o el famoso Mercado de la Boquería, ahora demasiado turístico pero al que te recomendamos que te acerques, aunque sea para dar un pequeño paseo.
Mercado de la Boquería
En el tramo final de la Rambla, según caminas en dirección al mar, encontrarás la Plaza Real (Plaça Reial), una de nuestras plazas preferidas y que se caracteriza por sus soportales y palmeras. En la plaza hay dos grandes farolas de seis brazos que fueron uno de los primeros encargos de Antonio Gaudí. Durante los fines de semana se reúnen los coleccionistas de sellos y de monedas.
Desde aquí es interesante perderse por alguna de las callejuelas para seguir esta ruta a pie que te llevará a descubrir el Barrio Gótico de Barcelona. Puedes callejear buscando la Plaza de Geroge Orwell, a la que se la conoce coloquialmente la Plaza del Tripi. En esta plaza está el Buen Bocado, un restaurante donde comer unos shawarmas deliciosos. No muy lejos de aquí está el Bar Mariatchi, del conocido cantante Manu Chao. Te recomendamos que te pierdas por sus calles hasta allí para llegar a la Plaza de San Jaime (Plaça Sant Jaume), donde estaba el núcleo de la antigua Barcino (nombre con el que se designaba a Barcelona en tiempos de los romanos) y que ahora cuenta con el Palau de la Generalitat Catalana y la sede del Ayuntamiento de Barcelona.
Desde aquí debes ir hacia la Calle del Obispo (Carrer del Bisbe), una pequeña calle peatonal, para ver uno de los lugares más fotografiados de Barcelona, el Puente del Obispo (Pont del Bisbe). Es un puente de estilo gótico-flamígero que une la Casa de los Canónigos (Casa dels Canonges) con el Palau de la Generalitat.
Plaza del Rey
Puedes continuar caminando en dirección hacia la Plaza Nueva (Plaça Nova), donde está la Catedral de Santa Cruz y Santa Eulalia pero te recomendamos que hagas un par de desviaciones. A mano derecha toma la Calle de la Piedad para ver el ábside de la Catedral y puedes continuar hasta la Plaza del Rey (Plaça dei Rei) que fue la sede del Palacio Real, una de las principales residencias de los Condes de Barcelona. La estructura original, construida sobre las murallas romanas, era semejante a la de una fortaleza, pero con el paso de los siglos se fueron levantando edificios sobre los lados de la plaza.
Si te interesa cerca de aquí el Templo de Augusto, un templo romano dedicado al culto imperial de César Augusto levantado en el foro de la ciudad. En la actualidad solo se conservan cuatro columnas que fueron descubiertas en el siglo XIX cuando se estaban llevando a cabo obras en esa zona. La entrada para ver los restos del Templo de Augusto es gratuita y abre todos los días: los lunes de 10:00 a 14:00, de martes a sábado de 10:00 a 19:00 y los domingos de 10:00 a 20:00.
Después vuelve a la Calle del Obispo (Carrer del Bisbe) y a mano izquierda toma la Calle de Montjuic del Obispo (Carrer de Montjuic del Bisbe) para llegar a una de nuestras plazas preferidas de Barcelona: la Plaza de Felipe Neri, que recibe el nombre de la iglesia de estilo barroco que hay en la plaza. Lo que más llama la atención, además de ser un oasis de paz en medio del barrio gótico de Barcelona, son los restos de la metralla de una bomba que fue lanzada por el bando nacional durante la Guerra Civil el 30 de enero de 1938. La mayoría de los heridos y víctimas mortales fueron niños que habían ido a refugiarse en el subterráneo de la iglesia.
Plaza de Felipe Neri
Desde aquí puedes retroceder hasta el Carrer del Bisbe y continuar hasta el final para llegar a la Plaza Nova. Aquí puedes ver la Catedral de Santa Cruz y Santa Eulalia, uno de los ejemplos de arquitectura catalana gótica del siglo XIV. En el emplazamiento de esta catedral hubo diferentes templos cristianos desde el siglo IV d. C. pero la construcción del actual edificio no comenzó hasta el siglo XIII. La catedral tiene una impresionante fachada gótica con 93 metros de largo por 40 de ancho, y posee un campanario de 53 metros de altura y una torre principal de 70 metros. Se puede visitar por dentro para ver la iglesia y el claustro, las terrazas y el coro. En este enlace puedes consultar los diferentes precios y horarios para la visita.
Cerca de la Catedral de Santa Cruz y Santa Eulalia está el conocido mural «El mundo nace en cada beso» del fotógrafo Joan Fontcuberta. Es un mural compuesto de 4000 teselas de cerámica con fotografías y que en conjunto forman la imagen de unos labios besándose.
De la Plaza Nueva puedes tomar la Calle Palla (Carrer de la Palla) hasta la Plaza del Pino (Plaça del Pi), presidida por la Basílica de Santa María del Pino, que tiene una fachada con un enorme rosetón y un majestuoso pórtico, típico del gótico catalán. Frente a la iglesia hay un bonito edificio del siglo XVII que fue sede de uno de los gremios de artesanos de la ciudad. En los bajos sobrevive uno de esos comercios de toda la vida, una cuchillería que tiene un escaparate precioso. En esta plaza a veces ponen un mercadillo y al otro lado de la Plaza del Pino hay otra plaza muy agradable, la Plaza de Sant Josep Oriol, con varios bares y terrazas donde tomar algo.
Escaparate de la cuchillería
Después de este paseo, te recomendamos dirigirte al barrio del Raval para comer. La oferta gastronómica es muy amplia y para todos los gustos. Te recomendamos el restaurante de la Monroe de la Filmo, perfecto para unas tapas, el restaurante mexicano La Rosa del Raval, las hamburguesas de la Informal, sentarte a tomar algo en el café Kino en la animada plaza del MACBA o las empanadas argentinas del Rekons.
Con el estómago lleno te animamos a descubrir el barrio del Raval, un barrio multicultural y que a menudo se lleva muy mala fama pero a nosotras es un barrio que nos gusta mucho. La mejor forma de descubrir el Raval es callejear. No debes irte sin conocer la famosa la Plaza de los Ángeles, donde está el MACBA (Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona). Si quieres visitar el museo, abre de lunes a viernes de 11:00 a 19:30, sábados de 10:00 a 20:00, domingos de 10:00 a 15:00 y los martes está cerrado. La entrada cuesta 11 euros, pero los sábados de 16:00 a 20:00 es gratuita.
MACBA
La Plaza de los Angeles suele estar muy animada, con gente montando en monopatín y hay varias terrazas donde tomar un café, una cerveza o un vino. En uno de los extremos de la plaza puedes buscar el mural de Eduardo Chillida y cerca de aquí también puedes ver el mural de Keith Haring donde se puede leer “Todos juntos podemos parar el sida”.
En el barrio del Raval también puedes buscar los Jardines de Rubió i Lluch que se encuentran en el patio del antiguo Hospital de la Santa Creu y la Casa de la Convalecencia. El recinto está construido en diferentes fases y estilos que se remontan desde el siglo XIV hasta el XVII. Otro de los lugares más icónicos de este barrio es la Rambla del Raval, un lugar también muy animado con bares y restaurantes con terrazas, ideal para tomar unas cervezas. Aquí se encuentra la famosa escultura del gato de Botero.
Desde la Rambla del Raval puedes caminar hasta la Estatua de Colón y desde ahí puedes dirigirte a la calle Paralelo. Aquí te proponemos que vayas a visitar el Jardín de Mossèn Costa i Llobera, un jardín especializado en cactus al abrigo de la montaña de Montjuic. Desde aquí puedes subir andando hasta el Castillo de Montjuic, pasando por el Mirador de Montjuic. Son unos 20-30 minutos de paseo y desde ambos lugares tendrás unas vistas panorámicas de la ciudad.
Jardín de cactus
Puedes terminar el día en el barrio de Poble Sec para tomar unas cervezas a ultima del día y cenar por allí. Puedes ir a la Calle Blai, la calle de pinchos de este barrio donde muchos bares y restaurantes ofrecen pinchos a 1 euro. Te recomendamos la Tasqueta de Blai, con bastante variedad de pinchos y bastante popular.
DÍA 2: GAUDÍ Y SUS EDIFICIOS ARQUITECTÓNICOS MÁS IMPORTANTES
Puedes empezar el día visitando el monumento más icónico de Barcelona: la Sagrada Familia. Aquí puedes llegar caminando o en metro con las líneas L2 y L5. Es la obra maestra de Gaudí y es una basílica que, como probablemente sepáis, no está terminada. Se comenzó a construir en 1882 y Gaudí trabajó en ella durante la mayor parte de su carrera profesional. Comenzó siendo en estilo neogótico pero pronto Gaudí lo concibió como un estilo orgánico, imitando las formas de la naturaleza, que tan características son del este edificio. Destacan la Fachada del Nacimiento, diseñada por Gaudí y llena de simbolismo en la que no debes perderte ni un solo detalle, y la Fachada de la Pasión, realizada posteriormente según los diseños y dibujos que había dejado Gaudí.
La Sagrada Familia
La iglesia se puede visitar por dentro y su interior se concibe como un bosque. Nosotras la visitamos por dentro hace bastante tiempo y nos pareció que merecía la pena, así que ahora que los trabajos están más avanzados suponemos que será aún más impresionante y recomendable. Eso sí, debes saber que no es nada barato: la entrada cuesta 17 euros en taquilla, 22 euros con acceso sin colas y 25 euros con audio guía. Si quieres visitarla por dentro, la iglesia abre a las 09:00 pero se forman largas colas y se venden un número de entradas limitadas al día, por lo que para asegurarte la visita debes acudir muy pronto o sacar la entrada con acceso sin colas.
Después puedes caminar hasta otro edificio menos conocido, el Hospital de Sant Pau, que es el conjunto modernista más grande del mundo y también la obra más importante del arquitecto modernista Lluís Domènech i Montaner. Son 12 pabellones rodeados de espacios verdes y conectados por un kilómetro de galerías subterráneas. Se puede visitar por dentro, la entrada cuesta 15 euros y es muy recomendable.
De aquí puedes caminar hacia el Parc Güell, el parque público más famoso de Barcelona que fue diseñado por el arquitecto Antoni Gaudí por encargo del empresario Eusebi Güell. El parque fue construido entre 1900 y 1914 y fue inaugurado como parque público en 1926. En tu visita no debes perderte los dos pabellones de entrada, que parecen sacados del cuento de Hansel y Gretel, el colorido lagarto, la Sala Hipóstila o de las Cien Columnas y la Plaza de la Naturaleza donde está el banco en forma de serpiente desde donde hay unas buenas vistas de Barcelona. Tampoco debes perderte los viaductos, la Casa-Museo de Gaudí, el Turó de les Creus o Calvario. Debes tener en cuenta que ha pasado de ser gratuito a ser de pago y con un cupo de entradas diarias limitado. Si no quieres hacer ninguna visita guiada, te recomendamos reservar esta entrada con antelación.
Park Güell
Tras la visita, puedes tomar el metro en Vallcarca o Lesseps (L3) hasta Plaza Cataluña y caminar hasta Plaza Universidad. En esta plaza está el edificio histórico de la Universidad de Barcelona, que puedes visitar por dentro si está abierto para ver el claustro y el vestíbulo principal. La biblioteca también es preciosa. Cerca de esta plaza, te recomendamos comer por el Eixample. Si tienes suerte y no hay mucha cola, puedes tapear en La Flauta y probar después un helado en DelaCrem.
Después de comer aprovecha para acercarte hacia Passeig de Gracia, uno de los paseos más elegantes de la ciudad y una calle llena de edificios de gran interés.
En el número 43 está la Casa Batlló, otro de los edificios más famosos de Gaudí. Fue construido en 1875 y, años más tarde, el edificio fue adquirido por Eduardo Batlló, de ahí su nombre. El estilo naturalista de Gaudí es innegable y esta casa tiene una de las fachadas más bonitas, con superficies curvas, balcones, columnas con representaciones vegetales y cristales, que hacen que literalmente, brille y resplandezca. Se puede visitar por dentro: abre de 09:00 a 20:00 y la entrada cuesta 25 euros. Si te animas a visitarla por dentro, en su interior destacan las vidrieras, los muebles y la azotea, donde las salidas de humo y ventilación son bonitas y recubiertas también con vidrios de colores.
Casa Batlló
Otros de los edificios modernistas importantes del Passeig de Gracia, se encuentran en la llamada “manzana de la discordia” (entre Carrer de Aragó y Consell de Cent). Aquí destacan la Casa Amatller, la Casa Lleó i Morera, la Casa Mulleras y la Casa Josefina Bonet.
En el número 92 está la Casa Milá (La Pedrera), otro de los edificios imprescindibles de Gaudí, encargo de Pere Milà y Roser Segimon y que fue la nueva residencia de la familia Milà. La Casa Milà tiene tres fachadas que presentan una continuidad formal y estilística que, por su forma sinuosa y ondulada, parece una roca modelada por las olas del mar. Se puede visitar por dentro: abre de 09:00 a 20:30 y la entrada cuesta 24 euros. Lo más interesante si te animas a visitarla por dentro es la azotea, aunque el interior de la casa es también un bello ejemplo de la arquitectura modernista de Gaudí. En la azotea, Gaudí situó las salidas de escalera, las chimeneas y las torres de ventilación, que tiene unas formas de lo más originales y que da la sensación de estar en un jardín de esculturas al aire libre.
Terraza de la Casa Milá de Gaudí
Para finalizar este segundo día en la ciudad condal, te recomendamos ir al barrio de Gracia, ya que es un buen lugar para terminar el día. Aquí puedes buscar una terraza en alguna de sus plazas más conocidas, como Plaza de la Villa de Gracia, la Plaza del Sol o la Plaza del Diamante. Lo ideal es encontrar hueco en alguna de las terrazas, aunque debes tener un poco de paciencia porque suelen estar muy llenas. Uno de nuestros bares preferidos es el Bar Canigó, perfecto para tomar unas cañas con buen ambiente. Para cenar puedes ir de tapeo puedes ir al Pepa Tomate, comer en el restaurante Yesterday o al restaurante mexicano Mexcla, aunque en Gracia tienes muchísima oferta.
DÍA 3: PASEO POR LA BARCELONETA, EL BORN Y PANORÁMICA DESDE EL BUNKER
Puedes comenzar acercándote hasta la playa de la Barceloneta para disfrutar del mar. Para ello puedes acercarte en metro hasta la parada Ciutadella Vila Olímpica (L4) y desde allí puedes acercarte hacia las famosas Torres Mapfre. El paseo que va desde aquí hasta el hotel W de Barcelona suele estar bastante animado y es una zona llena de bares, restaurantes, cafeterías y discotecas. La playa de la Barceloneta no es de las mejores playas pero al estar en el centro de la ciudad es una de las más populares.
Playa de la Barceloneta
El barrio de la Barceloneta es uno de esos barrios que ha sido tomado por los turistas y muchos de los pisos se han convertido en pisos para turistas, lo que ha creado bastante malestar entre sus habitantes. Por aquí, además de muchos locales pensados únicamente para los turistas que buscan sol, fiesta y playa, hay lugares de toda la vida que merecen la pena, como el restaurante Can Solé, un buen sitio para comer arroces y pescados, lleno de locales.
Desde la playa de la Barceloneta, te recomendamos que vayas a la famosa estación de trenes de Francia, a la que puedes entrar para echar un vistazo ya que en su interior hay una gran estructura metálica de estilo modernista muy interesante. Desde aquí estarás muy cerca del Parque de la Ciutadella y del famoso Arco de Triunfo en el Paseo de Lluís Companys. El Parque de la Ciutadella fue durante muchos años fue el único parque público de la ciudad condal y aquí se encuentra algunos edificios como el Museo de Ciencias Naturales de Barcelona o el Zoo. El Arco de Triunfo fue diseñado como entrada principal a la Exposición Universal de Barcelona de 1888 y ahora es meta de algunas carreras importantes como la Maratón de Barcelona y también se usa como recinto para algunos eventos musicales como el Primavera Sound.
Desde el Arco de Triunfo puedes comenzar la visita de uno de los barrios más emblemáticos de Barcelona: el Born. Para ello, te recomendamos que comiences por la la famosa Basílica de Santa María del Mar, construida entre 1329 y 1383. Es uno de los ejemplos más icónicos del gótico catalán. La fachada principal está enmarcada por dos torres octogonales y es bastante austera. El interior es impresionante: tiene tres naves de altura similar en las que hay numerosas capillas pero hay una ausencia casi total de obstáculos visuales, con lo que se consigue un espacio abierto y unitario. Es una basílica preciosa y te recomendamos que la visites también por dentro, ya que es impresionante. Además, si te has leído el libro de «La catedral del mar» de Ildefonso Falcones puedes casi sentir lo que costó colocar cada piedra de la catedral.
Interior de la Basílica de Santa María del Mar
Después puedes rodear la basílica por su lado derecho para llegar al Paseo del Born (Passeig del Born), una zona muy animada, llena de restaurantes, bares y sitios para tomar una copa. Es un buen lugar para comer. Si quieres comer por esta zona tienes varias opciones. Para comer comida catalana puedes ir al Joanet, un restaurante bastante familiar con platos típicos de la gastronomía catalana. Si quieres probar unas deliciosas hamburguesas, te recomendamos el Pim Pam Burger, donde no olvides pedir patatas que están brutales. También hay otras opciones como el Bar del Pla para tapear, las empanadas argentinas de Empanadas Club o el Mosquito, donde puedes comer tapas asiáticas. Si te gustan los dulces, no olvides pasarte por la Pastelería Hofmann para degustar algunos de sus deliciosos pasteles o croissants.
Con el estómago lleno, puedes buscar el Carrer de l’Allada-Vermell, una agradable calle peatonal donde puedes tomarte un café. Nos encanta la fachada llena de plantas y macetas. El barrio del Born se disfruta callejeando, así que lo mejor es que te pierdas por algunas de sus calles. En este barrio, en la Calle Princesa, está el Museo Picasso, interesante para los amantes del arte de este pintor español.
Otro de los edificios más emblemáticos de Barcelona y que está cerca del Born es el Palau de la Música, del arquitecto barcelonés Lluís Domènech i Montaner, uno de los máximos representantes del modernismo catalán, y que fue construido entre 1905 y 1908. Si te gusta la arquitectura modernista, te recomendamos que hagas la visita guiada por dentro porque la sala de conciertos es todo un espectáculo,
Desde aquí te recomendamos que vayas a la Plaza de Cataluña ya que para terminar el día te proponemos subir a nuestro mirador preferido de la ciudad, los Búnkers del Turó de la Rovira, en el barrio del Carmel. La manera más fácil de llegar es con el autobús 22 que sale de Plaza Catalunya y va hasta parada Pl Mitja Lluna. El trayecto es largo pero te ahorras una buena subida. También puedes ir en metro hasta la parada de Alfonso X (L4) y luego subir caminando unos 30 minutos colina arriba hasta llegar a los búnkers.
Vistas desde el bunker
Aquí vas a encontrar los restos de una batería antiaérea de la Guerra Civil Española que pretendía defender la ciudad de los bombardeos y que ahora es una de las sedes de la MUHBA, del Museo de Historia de Barcelona. Hasta hace unos años el lugar solo era conocido por los habitantes del barrio pero durante los últimos años se ha convertido en un lugar bastante frecuentado por lo que te recomendamos que vayas entre semana para disfrutar con más tranquilidad de este lugar.
Las vistas de 360º de Barcelona son, para nosotras, las mejores de la ciudad y desde luego merece la pena la subida. Además, es el lugar perfecto para poner el broche final a tu visita por Barcelona, admirar la ciudad desde las alturas y reposar todo lo que has visto en tu recorrido por la ciudad condal.
Esperamos que este post te sirva para sacar el máximo partido a Barcelona, una ciudad que merece la pena visitar y que está en nuestras ciudades europeas favoritas.
Si te gusta nuestro blog puedes usar nuestros enlaces de afiliados:
- Reserva tu seguro de viaje con Heymondo y tendrás un 5% de descuento.
- Reserva tu alojamiento con Booking
- Prueba el intercambio de casas con HomeExchange
- Reserva visitas guiadas y excursiones con Civitatis
- Adquiere tu tarjeta Revolut para tus viajes y consigue hasta 50 euros.