Orchha es un pequeño pueblo, situado en el estado de Madhya Pradesh. A unos 200 kilómetros de Khajuraho y a 250 kilómetros de Agra, es un lugar poco turístico y, si aparece en las guías, suelen recomendar pasar un día por su riqueza arquitectónica.
Sin embargo, nosotras pasamos tres días en esta pequeña localidad que queríamos conocer después de haber leído maravillas en el blog de Trajinando por el mundo, blog que nos animó a viajar por India. Fue todo un acierto y recordamos nuestros días en Orchha con muchísimo cariño, una de esas paradas en el camino que acaban por convertirse en lo mejor del viaje. En este post te queremos contar por qué debes incluir Orchha en tu ruta por el norte de la India.
RIQUEZA ARQUITECTÓNICA
Orchha debe su popularidad a su pasado ya que fue capital de los Bundela y cuando camines por sus calles te encontrarás con templos, palacios y cenotafios. Entre los monumentos más importantes destaca el fuerte de Orchha, del siglo XVI y que combina los estilos mongol e hindú. Sin duda, es uno de los lugares más icónicos de Orchha. El fuerte está situado en una isla formada por la confluencia de los ríos Betwa y Jamni. En el interior del fuerte hay un patio rectangular con palacios y templos. Los más importantes son los palacios Raj Mahal y Jehangir Mahal y el Rai Praveen Mahal.
El fuerte de Orchha
En Orchha también destaca el templo de Ram Raja, del siglo XVI, que es uno de los lugares más sagrados y venerados de la religión hindú. Hasta aquí se acercan cientos de peregrinos al año. El templo de Chaturbhuj es otro de los monumentos destacados en Orchha y fue construido en el siglo XVII. El templo tiene forma de cruz y está coronado por cúpulas con techos abovedados.
Otro de las imágenes icónicas de Orchha son los 14 Chhatris o cenotafios, tumbas reales de la dinastía Bundela que gobernó la zona. Son 14 cenotafios que fueron construidos en el siglo XVI y que están agrupados a orillas del río Betwa. Te recomendamos que te acerques a ver la vista de los cenotafios desde el río al atardecer. Además de ver el bullicio de la gente que se baña en el río, podrás disfrutar de unas bonitas vistas mientras cae el sol.
Cenotafios de Orchha
OASIS DE TRANQUILIDAD
Sin embargo, y a pesar de la belleza de estos monumentos, la magia de Orchha no solo reside en ellos. Orchha es un oasis de tranquilidad, un lugar perfecto para descansar, para relacionarte con los lugareños y salir un poco del bullicio que muchas veces es India.
Desayunando con una vaca
En pocos minutos sentirás que eres toda una celebridad porque la gente, y en especial los niños, te saludan curiosos e intentan entablar conversación contigo. Además, en Orchha no hay lugar para los ruidos o el trajín y caos que te puedes encontrar en la mayoría de las ciudades en India. Aquí puedes bajar las revoluciones y descansar, sentirte tranquila y pasear. Es un lugar perfecto para sentarte en cualquier sitio a observar el quehacer de sus habitantes, sin prisa, con calma. Es inevitable no sentirse bien en Orchha.
UN ALOJAMIENTO DIFERENTE
Si decides visitar Orchha, te recomendamos alojarte en Friends of Orchha. Se trata de una ONG que te permite alojarte con familias locales indias, creando así una simbiosis entre turismo responsable y desarrollo comunitario local. Las familias que participan en esta iniciativa son familias locales con recursos limitados y, al alojarte con ellos, les ayudas económicamente.
Nuestra anfitriona en el alojamiento de Friends of Orchha
Nosotras pasamos tres días con la familia Panchhal: Kirán y Rambabú, y dos de sus hijas, Nidhi y la pequeña Kushi. Sin duda, la estancia con la familia Panchhal fue lo que hizo especial nuestros días en esta ciudad. Aunque la falta de una lengua común hizo que nuestra comunicación fuera limitada, pasamos unos días inolvidables con la familia Panchhal y, además, nos cocinaron la comida más local que probamos en India.
Así que si decides incluir Orchha cuando planifiques una ruta por el norte de la India, desde este blog te lo recomendamos encarecidamente y esperamos que pases unos días inolvidables, como nos pasó a nosotras.