Marruecos es un país tan diferente y que está tan cerquita de España que es un destino perfecto para aquellos que quieran descubrir mundo sin tener que irse muy lejos. Además, como ya te contamos, viajar a Marruecos engancha y por eso hemos visitado nuestro país vecino en tres ocasiones.
Calles de Fez
En Marruecos se puede disfrutar de ajetreados mercados o zocos, de tranquilos pueblos costeros, de playas perfectas para los amantes del surf, de montañas espectaculares como el Atlas y desiertos magníficos como el Sáhara. La gente es amable, cercana y siempre están dispuestos a charlar contigo e invitarte a un té de menta. La gastronomía es simplemente deliciosa. Además Marruecos es un destino tan cercano que puedes dedicarle desde un fugaz fin de semana a unas cuantas semanas, siempre dependiendo de tu disponibilidad. En nuestra opinión lo ideal es pasar como mínimo una semana en el país. Si dispones de más tiempo, en este post te proponemos una ruta de dos semanas por nuestro país vecino.
CÓMO MOVERSE POR MARRUECOS
Moverse por Marruecos es bastante sencillo, seguro y cómodo. Puedes elegir diferentes formas de desplazarte de un sitio a otro y aquí te las contamos.
El autobús es una de las formas más prácticas para moverse por todo el país. Existen dos compañías de autobuses turísticos: CTM y SUPRATOURS, que conectan muchos de los diferentes puntos de país. En las páginas web podéis consultar las conexiones, los horarios y precios. En principio existe una opción para comprar los billetes online pero no estamos seguras de que funcione. En su momento no pudimos y compramos los billetes directamente en la estación. El equipaje se factura, hay personal encargado de su vigilancia y por eso hay que pagar un ticket extra. Un consejo: no olvides un pañuelo o sudadera porque suelen poner el aire acondicionado bastante fuerte.
El tren es otra de las formas más cómodas para moverse por Marruecos. La compañía que gestiona la red ferroviaria marroquí es Moroccan Railways (ONCF). En la página web podéis consultar conexiones, precios y horarios. Los trenes son bastante modernos y algo más económicos que los europeos. Existen dos tipos de trenes: el ordinario para servicios locales (TNR) y el rápido para trayectos interurbanos (TNC). La principal diferencia entre ambos es el confort y el aire acondicionado. Los billetes se compran directamente en la estación y en principio también online a través de la página web. Cuando compres el billete debes tener en cuenta que existen diferentes clases:
- Couchette, la clase más cómoda y por tanto más cara. Dispone de cabinas, con literas y aire acondicionado. Ideal para largas distancias.
- Primera clase: con asientos cómodos y aire acondicionado. Ideal para distancias cortas.
- Segunda clase: es el billete regular. Se ofrecen por orden de llegada. Los pasajeros pueden estar limitados en términos de asignación de asientos.
Los grand taxi es otra de las formas más comunes de moverse por Marruecos. Son taxis compartidos, con cinco plazas (tres detrás y dos delante, más el conductor) que hacen rutas fijas y conectan diferentes puntos del país. Debes conocer la estación de la que parten y una vez allí esperas a que tu taxi se llene, por lo que no hay un horario fijo. Dependiendo del caso te puede ser útil pagar la plaza que queda libre para ir más cómodo o porque ves que el taxi no termina de llenarse.
RUTA DETALLADA
Aquí te dejamos la ruta detallada de dos semanas por Marruecos y un mapa donde podrás encontrar los diferentes lugares.
Marrakech
Marrakech es una de las ciudades más conocidas de Marruecos y por tanto uno de los sitios más turísticos del país. Sin embargo, esto no le resta encanto porque es una ciudad preciosa. Lo más famoso de Marrakech es la Plaza Jemaa el Fna, un lugar que no debes perderte al atardecer. Cuando empieza a caer el sol la plaza se llena de puestos de comida, vendedores ambulantes, locales jugando a juegos tradicionales… Es todo un espectáculo disfrutar del ajetreo al pie de la plaza pero también merece la pena subir a una de las muchas terrazas que rodean la plaza y observar el quehacer de la gente.
En Marrakech también debes perderte por las calles de la Medina. Es más turística que en otras ciudades marroquíes como Fez o Meknes y a veces los vendedores pueden ser un poco insistentes. Busca a los tinteros, pasea por el zoco de las especias y piérdete por sus callejuelas. En Marrakech hay algunos monumentos que no debes perderte, como la famosa mezquita Koutoubia, la Madrasa de Ben Youssef, las tumbas saadíes, el Palacio de la Bahía o la Mellah, el antiguo barrio judío que a nosotras nos encantó.
Marrakech
Ouarzazate
Si vas a visitar por libre las dunas de Merzouga es interesante que hagas una parada para hacer el camino menos pesado. Por eso, creemos que Ouarzazate es el lugar ideal. Puedes llegar desde Marrakech en autobús. Se tarda unas 4-5 horas y puedes consultar los horarios que ofrecen las compañías CMT y Supratours. Ouarzazate es el lugar ideal para visitar Ait Benhaddou, una ciudad fortificada declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987. Está a unos 30 kilómetros de Ouarzazate pero se puede llegar en taxi fácilmente, solo tendrás que ser bueno regateando para conseguir un buen precio.
También puedes visitar la Kasbah Taourirt o, si eres cinéfilo, los estudios de cine Atlas Corporation Studios. Están a 5 kilómetros de Ouarzazate y allí se han rodado escenas de películas como «Lawrence de Arabia» (David Lean, 1962), «Gladiator» (Ridley Scott, 2000), «Astérix y Obélix: misión Cleopatra» (Alain Chabat, 2002), o «Babel» (Alejandro González Iñárritu, 2006), por citar algunas, y también escenas de series como «Juego de Tronos».
Ouarzazate
Merzouga
Merzouga es el pueblo al que debes llegar si quieres visitar el desierto del Sahara. Erg Chebbi es la zona arenosa del Sahara marroquí y tiene una longitud de 22 km de norte a sur y una anchura de 5 km. Aquí las dunas parecen montañas y es que algunas alcanzan una altura 150 metros. En este post te contamos las diferentes opciones que tienes para visitar las dunas de Merzouga. Sin duda, y aunque el viaje pueda ser un poco largo, creemos que no debes perderte disfrutar de este maravilloso paisaje. Es fascinante el color de la arena del desierto, la suavidad al tacto, el silencio ante tanta inmensidad, el cielo estrellado y la amabilidad del pueblo bereber.
Dunas de Merzouga
Rissani
Rissani es una pequeña población situada a 30 kilómetros de Merzouga por lo que es un lugar ideal para parar después de tu visita a las dunas de Merzouga. Intenta hacer coincidir tu visita con los días que hay mercado de ganado. Este tiene lugar los martes, jueves y domingos, desde las 10:30 hasta el mediodía. Podrás encontrarte desde venta de burros, vacas, cabras hasta puestos de dátiles y verduras frescas. También hay un pequeño zoco con zapatos, herreros, plantas medicinales y especias.
No debes irte sin comer la famosa pizza bereber. Nosotras la probamos en el Hotel Panorama, la hacen muy rica y además el personal es muy amable y nos dejaron dejar las mochilas mientras pasábamos el día en Rissani. Desde Rissani existen varios autobuses (a Fez o Meknes) nocturnos para continuar tu ruta que son muy prácticos porque te ahorran tiempo y una noche de alojamiento.
Rissani
Meknes
Meknes es una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos junto con Fez, Marrakech y Rabat. Está situada a 420 kilómetros de Merzouga y a 70 kilómetros de Fez. Aunque se puede visitar en un día, te recomendamos pasar 1 o 2 noches en ella pues existen algunos lugares muy recomendables a su alrededor.
En Meknes debes disfrutar de su medina. Es más pequeña pero variada y desde luego es menos estresante, que por ejemplo la de Marrakech. Puedes comprar de todo y es interesante perderse y encontrar el zoco de los tejedores, carniceros, etc. Meknes cuenta con una plaza que recuerda a la conocida Jemaa el-Fna de Marrakech, pero en versión más local y pequeña. La Plaza el Hedim con la imponente Puerta Bab el-Mansour es uno de los lugares más interesantes, sobre todo al atardecer cuando la plaza se llena de puestos de comida, de gente cantando o haciendo espectáculos. También puedes visitar la Prisión Kara o los establos reales.
Cerca de Meknes puedes visitar el yacimiento arqueológico de Volubilis y la ciudad santa de Mulay Idris. Puedes combinar esta visita en un mismo día porque están relativamente cerca y hasta allí puedes ir en Grand Taxi. Volubilis fue una ciudad fundada por los cartagineses, que después pasó a ser una ciudad romana, muy interesante de visitar. Mulay Idris es uno de los lugares de peregrinación más importante para los marroquíes, donde se encuentra el Mausoleo de Mulay Idris. Aunque no es posible acceder a él, Mulay Idris es una ciudad pequeña y pintoresca y un buen lugar para pasar medio día. En este post te contamos todo lo que debes hacer y donde debes alojarte en Meknes.
Meknes y sus alrededores
Fez
Fez es una de las cuatro ciudades imperiales junto con Marrakech, Meknes y Rabat. La ciudad se divide en tres zonas, Fès el-Bali, la zona antigua, dentro de las murallas, Fès el-Jdid, la zona nueva, donde se encuentra la Mellah (el barrio judío) y la Ville Nouvelle (Ciudad Nueva), la zona más amplia, creada durante la colonia francesa, en el sur de la ciudad.
La medina de Fez el-Bali es la mayor zona peatonal del mundo y fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1981. Aquí es donde te recomendamos que te alojes y donde están la mayoría de las atracciones turísticas como la Madrasa de Bou Inania o la Madrasa de Attarine. Aunque para nosotras lo mejor que puedes hacer es Fez es perderte por su enorme zoco y descubrir los diferentes zocos: el de los orfebres, tintores, sus famosos curtidores, de la especies, los pescaderos, carniceros y verduleros, etc. Fuera de la ciudad antigua está el imponente Palacio real al que sin duda te recomendamos que te acerques a pesar de que sólo puedes ver el exterior. En este post te contamos todo lo que puedes hacer en Fez.
Fez
Chefchauen
El pueblo azul de Marruecos es uno de los sitios que más nos gusto del norte del país. Está situado a unos 180 kilómetros de Fez. Para llegar hasta Chefchaouen desde Rissani debes tomar un autobús nocturno hasta Fez y una vez allí debes ir a la ciudad de las calles azules en Grand Taxi. No hay una ruta directa entre Fez y Chefchauen, por lo que tendrás que cambiar de taxi en Uezán. El trayecto completo dura aproximadamente 3-4 horas y cuesta unos 250 dirhams (70 dirhams el trayecto entre Chefchauen-Uezán y 180 dirhams el trayecto entre Uezán-Fez).
En Chefchaouen te recomendamos alojarte en el centro aunque los precios de los alojamientos en esta zona son menos económicos. Lo mejor que puedes hacer es perderte por las calles, todas ellas pintadas de un azul intenso. Según los locales, parece que es una tradición que los refugiados judíos trajeron en 1930. El azul hace referencias al cielo, símbolo de libertad y lugar en el que se encuentra su Dios. En Chefchaouen también debes visitar la Plaza Uta-el-Hammam, la Gran Mezquita y el Museo de la Kasbah o Alcazaba. También puedes salir por la puerta del este, Bab el Ansar y caminar unos 45 minutos para observar el pueblo desde un mirador.
Por cierto, que no te extrañe que en Chefchaouen huela a marihuana constantemente: existen muchas plantaciones de marihuana en los alrededores pero recuerda que su consumo es totalmente ilegal.
Chefchaouen
Asilah
Asilah es conocida como la perla del Atlántico. Está situada a 45 kilómetros de Tánger, a 159 kilómetros de Chefchaouen y a unos 400 kilómetros de Fez. Es una ciudad costera donde se respira tranquilidad y calma. Es ideal para pasar uno o dos días. Las casas de Asilah están pintadas de blanco lo que hace que resulte bastante pintoresco.
En Asilah puedes visitar su Medina, la Gran Mezquita, el cementerio y el mausoleo de Sidi Ahmed El Mansur y su muralla del siglo XV, Borj Al Kamr. También puedes acercarte al mirador mirador de Caraquia donde disfrutar de las vistas de la ciudad y del mar. Nosotras visitamos Asilah en temporada baja y la ciudad estaba muy tranquila y era un remanso de paz, pero ten en cuenta que si vas en los meses de verano, la ciudad de 12.000 habitantes pasa a superar los 100.000 habitantes
Asilah
Viajar a Marruecos engancha y por eso tenemos muchísimas ganas de volver a nuestro país vecino porque aún nos quedan muchos sitios por descubrir. Dejamos en los comentarios alguna recomendación para que lo incluyamos en nuestra próxima ruta por Marruecos.