El Valle de los Reyes es una necrópolis real situada en la orilla occidental de la antigua capital egipcia de Tebas, hoy Luxor, y aquí es donde están enterrados los reyes del Reino Nuevo. Está situado en la orilla occidental de Luxor, en un lugar apartado y tranquilo que está coronado por la montaña tebana. En árabe se la conoce como El-Qurna, que quiere decir “el cuerno”, y es una montaña que tiene forma piramidal y que, en cierto modo, podría recordar a las antiguas piámides egipcias.
El Valle de los Reyes es una de las visitas obligatorias en Luxor y en este post queremos contarte todo lo que necesitas saber para su visita, cómo son las tumbas y qué es lo más destacable de cada una de ellas.
UN POQUITO DE HISTORIA
El Valle de los Reyes fue el lugar de enterramiento de los reyes de las Dinastías XVIII, XIX y XX y aquí se enterraron reyes tan famosos como Hatshepsut, Tutankhamon, Seti I o Ramse¡és II. La necrópolis cayó en desuso cuando la capital se trasladó a Tanis (en el norte del país) durante la Dinastía XXI, dejando en manos de los sacerdotes de Amón el cuidado de las tumbas y la protección de la necrópolis de los saqueadores de tumbas.
Durante la Antigüedad varias tumbas del Valle de los Reyes fueron visitadas por griegos y romanos y prueba de ello son alguno de los grafitis que estos visitantes dejaron en algunas tumbas. Con la llegada de los musulmanes, el Valle de los Reyes quedó en el olvido hasta su descubrimiento con la expedición francesa de Napoleón en 1799.
A partir de ese momento se empiezan a identificar algunas tumbas y las excavaciones arqueológicas se multiplicaron a lo largo del siglo XIX y del siglo XX. Belzoni, Champollion o Maspero son algunos de los arqueólogos que trabajaron en la zona y que descubrieron algunas de las tumbas más bonitas del valle, como la de Seti I o Horemheb. Sin embargo, el mayor descubrimiento tiene lugar en 1922 cuando Howard Carter descubre la tumba casi intacta de Tutankhamon.
El Valle de los Reyes tiene 63 tumbas excavadas en la roca y que se extienden por dos valles: el Valle Este, donde se encuentran las tumbas numeradas con el código KV (King’s Valley), y el Valle Oeste, con las tumbas designadas con WV (West Valley). Todas las tumbas del Valle de los Reyes están numeradas según el orden en el que fueron descubiertas.
¿CÓMO SON LAS TUMBAS DEL VALLE DE LOS REYES?
Lo primero que nos gustaría que supieras es que hay una gran diferencia entre las primeras y las últimas tumbas que se construyeron en el Valle de los Reyes. Las tumbas de principios de la Dinastía XVII, como la KV 38 o la KV 20, están situadas al pie de acantilado o en zonas escondidas, con entradas pequeñas para no ser vistas y las plantas son acodadas, en decir, en un punto determinado de la tumba, el eje gira 90 grados.
Sin embargo, las tumbas ramésidas son completamente distintas. Son tumbas perfectamente visibles, tienen una entrada monumental e incluso, en algunos casos, se llega a suponer que pudieron tener hasta un pilono de entrada, del que por supuesto ya no queda nada. Además, son tumbas de un solo eje.
Aún así, podemos distinguir las siguientes partes de manera general:
- La entrada (espacio A)
- Tres corredores consecutivos (corredores B, C y D)
- La sala del pozo (sala E), aunque no todas las tumbas tienen pozos.
- La sala pilares o la llamada sala del carro (sala F) que se reconoce fácil porque es una sala con pilares y del que parten unas escaleras o rampa.
- Otro corredor (corredor G)
- La antecámara (sala H)
- Otro corredor (corredor I)
- La cámara sepulcral (sala J)
A nivel simbólico, encontramos dos partes bien diferenciadas:
- Espacio diurno: va de la entrada (espacio A) hasta la sala de los pilares (sala F) y es la parte de la tumba donde se enfatiza a Ra y a las divinidades femeninas. Es la parte de la tumba que simboliza el este, el aspecto diurno.
- Espacio nocturno: va desde el corredor G hasta la cámara sepulcral (sala J). Se enfatiza a Osiris y a las divinidades masculinas. Estamos en una zona donde se simboliza el oeste, una zona más oscura.
Los textos religiosos que suelen aparecer en las tumbas reales son los siguientes:
- Libro del Imiduat: se narra el recorrido del dios solar Ra por la Duat o inframundo durante las 12 horas de la noche, venciendo los peligros y renaciendo al amanecer.
- Letanía de Ra: se exponen las 76 formas del dios Ra, el dios solar.
Letanía de Ra
- Libro de las Puertas: se narra el viaje del difunto por la Duat durante las horas nocturnas, relacionado con el viaje deL dios solar Ra. En este viaje se debe pasar una serie de «puertas» en diferentes etapas.
- Libro de las Cavernas: se narra el viaje del difunto por la Duat pero aquí el difunto atraviesa una serie de cuevas y se relatan los premios o castigos que puede recibir o padecer. Tiene la mejor descripción del infierno egipcio.
- Libro de la Salida al Día o Libro de los Muertos: es un conjunto de consejos, conjuros, fórmulas mágicas destinados a ayudar a los difuntos a superar el juicio de Osiris, asistirlos en su viaje a través de la Duat y viajar al Aaru, el más allá egipcio.
- Libro de Nut: es un conjunto de textos que se centran en los ciclos de las estrellas de los decanos, los movimientos de la luna, el sol y los planetas, en los relojes de sol y otros asuntos relacionados. También incluye varios temas mitológicos.
- Libro de la Noche: se centra en el viaje del dios del solar durante la noche por la Duat. El dios del sol aparece con cabeza de carnero del tiempo nocturno.
- Libro del Día: se centra en el viaje del dios del solar Ra durante el día y el dios del sol aparece con cabeza de halcón.
- Libro de la Tierra: también trata el viaje del dios solar Ra por la Duat, venciendo los peligros y renaciendo al amanecer.
Detalle del techo con la diosa Nut
¿QUÉ HORARIO TIENE Y CUÁNTO CUESTA?
El Valle de los Reyes está abierto de 06:00 a 17:00, pero si viajas en Ramadán debes de tener en cuenta que estos horarios pueden cambiar. Te recomendamos que hagas la visita a primerísima hora del día para así evitar los grupos de los cruceros. La entrada se compra en el centro de visitantes del Valle de los Reyes, cuesta 400 LE o 200 LE si eres estudiante e incluye la visita a 3 tumbas regulares que puedes elegir. Las tumbas abiertas en nuestro último viaje a Egipto eran las siguientes (abril 2023):
- KV 1: Tumba de Ramsés VII
- KV 2: Ramses IV
- KV 6: Tumba de Ramsés IX
- KV 8: Tumba de Merenptah
- KV 11: Tumba de Ramsés III
- KV 14: Tumba de Tausert/Setnakht
- KV 15: Tumba de Seti II
- KV 16: Tumba de Ramsés I
- KV 43: Tutmosis IV
- KV 47: Tumba de Siptah
Además de estas tumbas regulares existen cuatro tumbas especiales, que tienen entrada individual y son las siguientes:
- KV 9: Tumba de Ramsés V y Ramsés VI. La entrada cuesta 120 LE o 60 LE si eres estudiante.
- KV 62: Tumba de Tutankhamon. La entrada cuesta 360 LE o 180 LE si eres estudiante.
- KV 17: Tumba de Seti I. La entrada cuesta 1400 LE y aquí no se aplica el descuento de estudiante.
- WV23: Tumba de Ay. La entrada cuesta 60 LE y 30 LE si eres estudiante. Esta tumba está situada en la parte occidental del Valle de los Reyes-
Aquellas personas que tengan el Estándar Luxor Pass pueden entrar en todas las tumbas del Valle de los Reyes, a excepción de la tumba de Seti I. Si tienes el Premium Luxor Pass puedes acceder a todas las tumbas de Valle de los Reyes, incluida la tumba de Seit I. Si quieres saber más sobre estos tickets especiales, puedes leer este post.
Si quieres acercarte del centro de visitantes a la entrada propiamente dicha del Valle de los Reyes puedes tomar un pequeño tren que cuesta 10 LE (ida y vuelta). Se puede ir perfectamente andando, aunque si hace mucho calor y estás muy cansado, pueden ser 10 LE muy bien invertidas.
¿QUÉ TUMBAS PUEDO VISITAR?
En el Valle de los Reyes hay 63 tumbas pero no todas las tumbas están abiertas. Solo se abren 8 tumbas al público y no siempre son las mismas. A estas 8 tumbas, hay que añadir las 3 tumbas especiales, anteriormente mencionadas.
Todas las tumbas del Valle de los Reyes son diferentes y, como no siempre vas a encontrar las mismas tumbas abiertas, en esta guía del Valle de los Reyes encontrarás las descripciones de las tumbas más interesantes y que hemos visitado en nuestros diferentes viajes por Egipto.
Las tumbas regulares
La tumba de Tutmosis III (KV 34)
Fue una de las primeras tumbas en excavarse en el Valle de los Reyes y está en lo alto de un despeñadero. Para acceder a ella debes subir por unas escaleras empinadas por donde accedes a la tumba propiamente dicha. A continuación se desciende por un pasillo, que en un momento dado gira 90 grados, hasta llegar a la última sala: la sala del sarcófago, que tiene forma ovalada.
La decoración de esta tumba es muy interesante. En la antecámara encontramos un listado de más de 740 dioses del Imiduat y en los pilares se pueden ver las cuadrículas que servían para preparar la decoración en las tumbas.
En la cámara sepulcral encontramos como decoración el Libro del Imiduat, la versión más antigua y en los pilares encontramos la Letanía de Ra. Además, en uno de esos pilares hay una escena que nos encanta: Tutmosis es abrazado y amamantado por un árbol, que tiene un pecho y en la inscripción se dice que es su madre Isis que le amamanta.
Tumba de Tutmosis III (Foto de la página web Theban Mapping Project)
La tumba de Amehotep II (KV 35)
La tumba de Amehotep II está situada cerca del acantilado y es muy similar a la tumba de Tutmosis III (KV 34), aunque con algunas diferencias que podemos apreciar en la cámara sepulcral. Ésta ya no es ovalada sino que es rectangular, de grandes dimensiones y está distribuida en dos niveles. En un primer nivel vemos seis pilares, donde se representan a algunos dioses recibiendo a Amenhotep II y el Libro del Imiduat en las paredes de la cámara; en el segundo nivel está el sarcófago.
La tumba de Horemheb (KV 57)
Horemheb es el último rey de la Dinastía XVIII y es interesante visitar su tumba porque aquí se pueden apreciar algunas diferencias con respecto a las tumbas de principios y mediados de la Dinastía XVIII. Para empezar la tumba sigue un único eje y tiene 128 metros de longitud. A partir de ahora veremos que las tumbas son rectilíneas y empiezan a ser cada vez más monumentales.
En la sala del pozo (la primera sala) nos encontramos a Horemheb siendo recibido por divinidades. El color de fondo es gris azulado y es propio de la tumba de Horemheb. Fíjate cómo las figuras del faraón se dirigen hacia el fondo de la tumba ya que éste es el sentido de introducción hacia el interior de la tumba.
Tumba de Horemheb (Foto de la página web Theban Mapping Project)
La decoración en la cámara sepulcral está inacabada a pesar de que Horemheb gobernó más de 20 años. Las paredes prácticamente son un boceto y nos sirve para ver cómo trabajaban los artesanos: se ven las líneas rojas y negras de los bocetos con las correcciones y también se ve cómo se empezaba a rebajar para hacer el relieve.
Algo novedoso de la tumba de Horemheb es que encontramos el Libro de las Puertas, el compendio religioso que a partir de este momento vamos a empezar a ver junto al Libro del Imiduat en el Valle de los Reyes.
La tumba de Ramsés I (KV 16)
La tumba de Ramsés I es una tumba de modestas dimensiones e inacabada pero aún así, es una tumba generalmente muy visitada por los turistas porque está situada a la entrada del Valle de los Reyes. Por estos motivos, es mejor que elijas otras tumbas con tu entrada general.
La única decoración que vamos a hallar en la tumba está en la cámara sepulcral y aquí tenemos el Libro de las Puertas. Aquí se puede apreciar que los trabajos en esta parte de la tumba se realizaron con mucha rapidez, posiblemente porque el rey murió antes de lo previsto. Por eso, no hay relieve, sino que las imágenes están pintadas, que era un proceso mucho más rápido.
En el centro de la cámara sepulcral hay un sarcófago de granito que tampoco presenta relieve, sino que está pintado. Una muestra más de la rapidez con la que se tuvo que llevar a cabo el enterramiento del monarca.
La tumba de Merenptah (KV 8)
La tumba de Merenptah es una de las tumbas más largas del Valle de los Reyes y donde encontramos todo lo que deberíamos esperar de una tumba de esta época. Así en los primeros corredores aparecen la Letanía de Ra, el Libro de las Puertas y el Libro del Imiduat. A continuación, en la sala de pozo aparece el rey siendo recibido por diferentes divinidades. Si continuamos podemos ver escenas de la Apertura de la Boca (ritual mediante el cual mediante el cual, se devolvía el uso de la boca y los ojos al difunto) en la sala de pilares y el sepulcro de Osiris y en los siguientes corredores nos encontramos con Libro de la Salida al Día o Libro de los Muertos.
A partir de un momento desaparece la decoración y llegamos a la antecámara, donde está la tapa del sarcófago exterior de Merenptah. La cámara sepulcral presenta algo de decoración, donde destaca el Libro de las Puertas, Libro de las Cavernas y un techo astronómico, aunque no es de las tumbas más impresionantes del Valle de los Reyes. En la cámara sepulcral se puede ver la tapa de otro de los sarcófagos de este rey.
Libro de las Cavernas en la tumba de Merenptah (Foto de la página web Theban Mapping Project)
La tumba de Seti II (KV 15)
Seti II, recordemos, es hijo de Merenptah y nieto de Ramsés II. A principios de su reinado, sufrió una usurpación por parte de Amenmesse. En esta tumba destaca la decoración de la sala del pozo, donde podemos ver una serie de figuras que recuerdan mucho a algunas figuras que se descubrieron en la tumba de Tutankhamon y las representadas aquí pueden sustituir simbólicamente las figuras reales de madera, doradas, que podrían haber decorado esta parte de la tumba.
Más allá de la sala de pilares, la tumba queda inacabada. Hay un corredor a medio hacer en el que se improvisa una cámara sepulcral donde se encontró la tapa del sarcófago de Seti II.
La tumba de Siptah (KV 47)
Es una de las más largas del Valle de los Reyes con sus 125 metros de longitud y pertenece a Siptah, un rey que apenas reinó 6 años y por ese motivo está inacabada. La decoración de la primera parte de la tumba es preciosa y en ella destacan varias escenas, como la de las tres formas principales de la divinidad solar como Ra, como Khepri y como Atum, o la imagen de la diosa Maat con las alas desplegadas. En el techo destaca una imagen en la que vemos el disco solar pintado de rojo con una figura de ave pero con cabeza de carnero representando el dios solar nocturno. Acompañan al disco solar las diosas Neftis e Isis, también representadas en forma de milano.
Detalle de la tumba Siptah
Si te fijas en esta parte de la tumba que está decorada puedes ver una peculiaridad: los cartuchos de Siptah fueron eliminados para, posteriormente, ser incluidos de nuevo. No se sabe muy bien quién participó en esta usurpación y quién exactamente fue el protagonista de la rehabilitación de Siptah.
Si sigues avanzando, llega un momento en el que vemos que la tumba no tiene decoración y así se llega a la cámara sepulcral, que conserva el sarcófago de granito.
La tumba de Tausert y Sethnakht (KV 14)
Tausert es esposa real de Seti II, pero la tumba pasará por varias fases y por este motivo esta tumba es interesante de visitar. Cuando muere Seti II, Tausert seguirá realizando esta tumba como regente del joven Siptah. Por eso, las medidas de la primera parte de la tumba están más bien adaptadas a la tumba de una reina, de Tausert.
Sin embargo, estas medidas van a cambiar completamente en partes más profundas de la tumba, ya que cuando muere Siptah, Tausert aún tendrá un margen de poco más de dos años para seguir excavando la tumba y seguir decorándola, pero esta vez ya como reina reinante, es decir, a modo de faraón. Pero esto no acaba aquí. En época de Ramsés III, el propio Ramsés III entierra a su padre, a Sethnakht, en esta tumba, de modo que eso provoca la damnatio memoriae de Tausert (práctica que consiste en condenar el recuerdo de alguien) y la modificación de muchas escenas para Sethnakht.
Tumba de Tausert y Sethnakht (Foto de la página web Theban Mapping Project)
La KV 14 es una de las más largas, con casi 160 metros de longitud. De esta tumba destaca que tenemos dos cámaras sepulcrales: la primera que realiza Tausert en sus primeras fases de construcción antes de ser reina reinante y después nos encontramos con la segunda cámara sepulcral, que ella se prepara como reina faraón y cuyas dimensiones son mayores porque aquí adquiere unas dimensiones propias de un rey.
En la decoración de la primera cámara sepulcral encontramos el Libro de las Puertas, el Libro de las Cavernas y un techo astronómico, aunque no muy bien conservado. En la segunda cámara sepulcral encontramos nuevamente un techo astronómico y el Libro de las Puertas. La decoración de ambas cámaras sepulcrales es preciosa.
El sarcófago que se ve es el de Sethnakht, que finalmente encontró su lugar de reposo en la tumba de Tausert una vez se hicieron las modificaciones en la decoración.
La tumba de Ramsés III (KV 11)
Esta tumba es conocida como tumba de Ramsés III porque fue el lugar dónde él se enterró pero en realidad es una tumba que fue comenzada por Sethnakht, el fundador de la Dinastía XX, el padre de Ramsés III, al que se terminó enterrando en la tumba de Tausert (KV 14). Por tanto, Sethnakht comienza a construir esta tumba y probablemente llega hasta la sala de pilares. A partir de ahí, Ramsés III continúa la tumba desde la sala de pilares hasta el final.
En los primeros corredores nos encontramos con Letanía de Ra, como suele ser habitual. Aquí hay 8 cámaras laterales en las que hallamos decoración relacionada con estandartes, figuras de divinidades asociadas a los nomos (provincias egipcias) y también aparecen representados contenedores de vino y unos marfiles, es decir, toda una serie de objetos que formaban parte del ajuar funerario de Ramsés III.
Detalle de recipientes de vino y marfiles de la tumba de Ramses III (Foto de la página web Theban Mapping Project)
En las salas y corredores siguientes aparecen escenas del Libro de las Puertas, en la sala de pilares, algunas escenas del ritual de Apertura de la Boca hasta que llegamos a la cámara sepulcral que ha sufrido muchísimos daños y la decoración está muy destruida.
La tumba de Ramsés IV (KV 2)
Es la segunda tumba que nos encontramos en el Valle de los Reyes y por tanto también es una de las más visitadas por los grupos de turistas. La tumba de Ramsés IV fue usada como capilla durante la época copta y por eso se han encontrado más de 50 grafitis coptos.
En los dos primeros corredores nos encontramos con la Letanía de Ra y el Libro de las Cavernas. En esta tumba no encontramos la sala de pilares, posiblemente porque la muerte del rey obligó a los artesanos a realizar la cámara sepulcral antes de lo previsto.
En las paredes de la cámara sepulcral encontramos el Libro de las Puertas y en el techo de la cámara sepulcral vemos el Libro de Nut y el Libro de la Noche. Además en esta tumba también destaca el enorme sarcófago de este rey, una pieza monolítica de granito que alcanza los 3,5 metros de altura.
La tumba de Ramsés VII (KV 1)
La tumba de Ramsés VII es la primera que encontramos al llegar al Valle de los Reyes y, debido a su situación, es una de las tumbas más visitadas por los grupos que, al disponer de tiempo limitado, visitan las tumbas más cercanas a la entrada. Si puedes, te recomendamos que visites otras tumbas ya que habrá menos gente y hay algunas más espectaculares.
Es una tumba pequeña y corta (apenas llega a los 45 metros de longitud), en comparación con otras tumbas del valle y destaca la decoración de la cámara sepulcral. Aquí podemos ver diferentes escenas del Libro de la Tierra, en el techo vemos los relojes estelares ramésidas y también hay un techo astronómico. Aquí se distinguen las listas de decanos o estrellas horarias y también representaciones de las constelaciones, como por ejemplo el toro, en egipcio Meskhetyu, que sería nuestra Osa Mayor.
La tumba de Ramsés IX (KV 6)
Durante las excavaciones de la tumba se encontró un ostraca en el que aparece la planta de la propia tumba de Ramsés IX, que hoy está en el Museo Egipcio de Turín, y que es muy interesante para saber cómo trabajaban los artesanos.
En los primeros corredores de la tumba encontramos los textos que vienen siendo habituales, como la Letanía de Ra, el Libro de las Cavernas y el Libro del Imiduat. También vemos al rey recibido por diferentes divinidades. En el techo de estos corredores encontramos techos astronómicos y aquí destacan las tablas de relojes estelares ramésidas, en las que vemos una serie de cuadrículas en las que aparecen marcadas estrellas.
Detalle de la tumba de Ramses IX
La sala de pilares quedó sin decorar y, a partir de aquí, se desciende por el corredor que nos lleva a la improvisada cámara sepulcral, donde encontramos el Libro de las Cavernas y el Libro de la Tierra. En el techo tenemos dos partes que corresponden al Libro del Día, con una doble figura de la diosa Nut. Aquí se representa el nacimiento del día y se puede ver una imagen de la diosa Nut embarazada y también se representa el final del día.
Las tumbas especiales
La tumba de Ramsés V y VI (KV 9)
Es la tumba de Ramsés V y Ramsés VI, dos reyes de finales del Reino Nuevo. La KV 9 fue una tumba muy accesible en tiempos antiguos debido a su monumentalidad. De hecho, aquí se han encontrado más de 1.000 grafitis de época grecorromana y copta.
La decoración de esta tumba es una de las más impresionantes del Valle de los Reyes y merece la pena pagar la entrada extra para visitarla. En los primeros corredores encontramos el Libro de las Cavernas, el Libro de las Puertas y referencias astronómicas, entre las que destacan los relojes estelares ramésidas.
Si sigues avanzando, llegarás a la sala de pilares que es magnífica. Aquí estamos ante el sepulcro de Osiris y destaca la escena en la que Osiris aparece representado sentado. También destaca en el techo el Libro de los Cielos y vemos como la barca solar se dirige a la boca de la diosa Nut, representando precisamente que el día llega a su fin.
La cámara sepulcral es impresionante y aquí encontramos la primera versión completa del Libro de la Tierra y en el techo nos encontramos con el Libro del Día y el Libro de la Noche. Más allá de la cámara sepulcral hay una pequeña sala en la que se representa una escena muy famosa, en la que el dios Nun alza la barca solar sobre cuyo disco vemos formas asociadas a Osiris y a la diosa Nut y que es la escena final del Libro de las Puertas.
Tumba de Ramses V y VI
La tumba de Tutankhamon (KV 62)
El 24 de noviembre de 1922 Howard Carter hizo un pequeño agujero y pudo ver el interior de la tumba de Tutankhamon, en la que nadie había entrado desde hacía 33 siglos. Le acompañaba Carnarvon, que impaciente le preguntó “¿qué ves?”, a lo que Carter respondió, “cosas maravillosas”. El descubrimiento de la tumba de Tutankhamon es, sin lugar a dudas, el más famoso de todos los descubrimientos acontecidos en Egipto.
Tutankhamon fue un rey de la Dinastía XVIII, que gobernó tras Akhenaton y que murió relativamente joven. Su reinado no tuvo especial relevancia y, desde luego, no puede compararse con el reinado de otros reyes del Reino Nuevo, como Tutmosis III o Ramsés II. Por eso, su tumba es de modestas dimensiones y casi parece más la tumba de un noble. Sin embargo, ya en al antigüedad quedó cubierta por la tumba de Ramsés IX (KV 6), por lo que quedó oculta hasta su descubrimiento en 1922.
En el interior solo encontramos decoración en la cámara sepulcral y aquí destacan las escenas en las que podemos ver a Tutankhamon junto a su sucesor Ay, vestido con piel de pantera actuando de sacerdote en el ritual de Apertura de la Boca y frente al dios Osiris. También destaca la escena del cortejo fúnebre, en la que los funcionarios arrastran un trineo con el cuerpo del faraón y en otra de las paredes vemos una versión muy abreviada del Libro del Imiduat, con los 12 babuinos que representan las 12 horas de la noche y en un extremo la barca solar con un escarabajo.
Tumba de Tutankhamon (Foto de la página web Theban Mapping Project)
La tumba de Seti I (KV 17)
La tumba de Seti I es una de las tumbas más impresionantes del Valle de los Reyes y la entrada que se debe pagar extra es cara. Fue descubierta en 1817 por Belzoni y en su descripción nos dice lo siguiente: “Puedo considerar el día de ese descubrimiento como uno de los más afortunados de mi vida. Y quienes saben, por experiencia, tener éxito en una empresa larga y penosa más allá de lo esperado son los únicos que pueden imaginar la alegría que me dominó al penetrar como primero de todos los hombres que actualmente viven en el globo, en uno de los más hermosos monumentos del antiguo Egipto; en un monumento que se había perdido para el mundo y que está tan bien conservado que se diría que acababan de terminarlo un poco antes de nuestra entrada”.
La tumba en realidad tiene dos sectores claramente diferenciables. Por una parte lo que es la tumba propiamente dicha, desde la entrada a la cámara sepulcral y, por otro lado, una segunda parte que consiste en un corredor que parte desde la cámara sepulcral y que se desarrolla con gran inclinación hacia un punto muy cercano al nivel freático, relacionado con el mundo de Sokar, el dios del Más Allá.
En los primeros corredores encontramos, como viene siendo habitual la Letanía de Ra, esas 75 invocaciones de Ra, partes del Libro del Imiduat y el Libro de las Cavernas. Continuando se llega a la sala de pilares, donde se puede ver los muros están pintados de blanco, exceptuando una escena en la que Seti está siendo presentado por Horus al dios Osiris. En los muros hay escenas procedentes del Libro de las Puertas.
Constelaciones boreales de la tumba de Seti I (Foto de la página web Theban Mapping Project)
Desde esta misma sala, además, se accede a una cámara anexa, una cámara lateral que es muy interesante porque el programa iconográfico tan sólo está esbozado. Así se puede ver un poco los procesos de trabajo que acontecían en la tumba.
Después se pasa por un corredor en el que hay las escenas del ritual de Apertura de la Boca, y una sala en la que Seti I aparece siendo recibido por diferentes divinidades para llegar, por último a la maravillosa cámara sepulcral. Aquí destaca un gran techo astronómico donde se representan diferentes constelaciones, con la novedad de que no es techo plano sino que es un techo abovedado, recordando de alguna manera a la forma de la bóveda celeste. En los muros se encuentran distintas partes de los Libros del Imiduat y del Libro de las Puertas, y además, hay cuatro salas anexas.
La tumba de Seti I es cara, pero es simplemente espectacular, hasta el punto en que Sara se emocionó tanto que lloró. Si puedes, te recomendamos que pagues la entrada y disfrutes de esta maravilla.
La tumba de Ay (WV23)
Ay sucedió a Tutankhamón en el trono y su reinado fue bastante breve. La tumba de Ay se sitúa en la zona oeste del Valle de los Reyes y por eso la nomenclatura de la tumba es diferente: West Valley (WV). Su tumba fue descubierta en 1816 por el egiptólogo Belzoni, quien dijo al descubrirla «por sus extensión, y parte de los sarcófagos que quedan ene l centro de una amplia cámara, quizás era el emplazamiento funerario de alguien distinguido«. Esto nos indica que la tumba no es de grandes dimensiones, como se podía esperar para un rey. La tumba cuenta con un eje que va de norte a sur que conducen a la cámara sepulcral, la única cámara decorada y donde se encuentra el sarcófago. Aquí el rey Ay aparece representado junto a varias divinidades y hay una escena de caza en los pantanos. La decoración resulta muy similar a la de la tumba de su predecesor Tutankhamón, por lo que es una buena alternativa para visitar una tumba con unas características muy parecidas a la de Tutankhamón pero más económica y con menos gente.
¿CUÁLES SON LAS MEJORES TUMBAS PARA VISITAR?
Nosotras te proponemos la visita de tres tumbas o grupos de tumbas que creemos que son importantes donde se puede apreciar el cambio de estructura desde principios del Reino Nuevo (Dinastía XVIII) hasta finales del mismo (Dinastía XX):
- Tumbas de principios de la Dinastía XVIII: las tumbas de Tutmosis III (KV 34) y Amenhotep II (KV 35) son dos de nuestras tumbas favoritas. Están escondidas en el acantilado, no tienen un eje único y la decoración, aunque no es tan espectacular como las tumbas ramésidas, nos encanta.
- Tumbas de finales de la Dinastía XVIII: en la tumba de Horemheb (KV 57) se puede apreciar esa transición que se empieza a dar a finales de la Dinastía XVIII y, por ese motivo, resulta muy interesante de visitar.
- Tumbas rámesidas (Dinastías XIX y XX): muchas veces solo hay tumbas abiertas de este período del Reino Nuevo y las tumbas más interesantes para visitar son la tumba de Tausert y Sethnakht (KV 14), la tumba de Ramsés IX (KV 6).
Además, nos gustaría recomendarte que pagues la entrada extra de la tumba de Ramsés V y Ramsés VI (KV 9), ya que cuesta apenas 120 LE y estamos seguras de que no te vas a arrepentir. Y si quieres darte un capricho (caro), la tumba de Seti I no va a dejarte indiferente.
Esperamos que esta guía os sirva de ayuda para preparar vuestra visita al Valle de los Reyes y que podáis decidir qué tumbas visitar y qué encontrar en cada una de ellas.